*No hay escuela para ser ministro. Como todo oficio, se aprende trabajando y con el propio cuerpo. Pero si alguien se animara a fundar un instituto profesional debería llamar a un veterano: el jefe de Gabinete Aníbal Fernández se convirtió en el ministro que más duró en cargos de ese rango en la historia contemporánea de la Argentina.
Estos días usa su IPod de calculadora y comenta su record mientras ofrece una receta: “Ser ministro no es cosa de abogado, aunque yo lo sea, sino de dirigente político con vocación por la cosa pública, con conocimiento de los actores y los mecanismos de la política y del Estado y con la decisión de dedicarse tiempo completo a la función sin quedarse pendiente todo el día del distrito de donde uno viene”. Conocido porque llega antes de las siete de la mañana a la Casa Rosada y la deja después de las 11 de la noche, Fernández suele decir a sus colaboradores que “acá cuando hace falta trabajar no hay Día de la Madre ni Yom Kippur”. Y agrega: “Yo me preparé como un cuadro político del peronismo y eso soy”.
Fernández asumió como ministro de la Producción de Eduardo Duhalde el 4 de octubre de 2002. Hoy, 6 de noviembre de 2011, habrá cumplido nueve años y 62 días ininterrumpidos al frente de un ministerio.
Después de su gestión con Duhalde, Fernández fue ministro del Interior de Néstor Kirchner, ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos de Cristina Fernández de Kirchner, y desde 2009 jefe de Gabinete de ministros. Estuvo sin interrupciones con tres presidentes, uno elegido por el Congreso tras la crisis del 2001 y los otros dos por el voto popular.
El desplazado del primer lugar es otro ministro de un gobierno peronista. Se trata de Ángel Borlenghi, el dirigente mercantil de origen socialista que fue ministro del Interior de Juan Domingo Perón durante 9 años y 26 días entre 1946 y junio de 1955.
Dos países distintos aparecen en la despedida de Borlenghi y en la de Fernández. El socialista devenido laborista y luego peronista dejó el cargo tras los bombardeos y la masacre en Plaza de Mayo del 16 de junio de 1955. El jefe de Gabinete fue electo senador nacional por la provincia de Buenos Aires con 4.600.000 votos. El 10 de diciembre se mudará de la Casa Rosada a la Cámara alta en una nación que no vive en medio de la crisis ni afronta un riesgo de golpe.
Nacido en Quilmes el 9 de enero de 1957 (está por cumplir 55), este peronista que admira tanto a Rubén Juárez como al Indio Solari y llegó a tocar la guitarra con Juanjo Domínguez parece ministro por oficio. Estaba al frente de la cartera de Trabajo de la provincia de Buenos Aires cuando el sábado 29 de diciembre de 2001 vio que el entonces presidente Adolfo Rodríguez Saá huía de la residencia de Chapadmalal para terminar renunciando en San Luis. El presidente provisional del Senado, Ramón Puerta, segundo en la línea de sucesión presidencial, mandó decir que estaba fuera del país, un dato que hasta ahora nadie comprobó. Fernández se comunicó con Eduardo Camaño, presidente de la Cámara de Diputados, tercero en esa línea.
* Martín Granovsky
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