lunes, 6 de marzo de 2017

Administración Trump se intensifica campaña de miedo y terror contra los inmigrantes


6 de marzo de 2017
Otra semana de campaña de la administración del triunfo contra los inmigrantes indocumentados ha traído una nueva ronda de casos atroces en las que los residentes de larga data de Estados Unidos han sido arrebatados de sus familias y, o bien encarcelados o deportados.
La letanía de horrores ha sido casi totalmente ignorado por los medios nacionales y el Partido Demócrata, que se centra en una batalla feroz dentro del Estado sobre la política exterior. No es brutal represión de la administración de los trabajadores inmigrantes que es objeto de críticas desde dentro de la clase política, pero los lazos de Trump a Rusia.
El martes, Rómulo Avelica-González fue detenido por Inmigración y Aduanas después de dejar a su hija en la escuela en Los Ángeles. Dos vagones de los agentes de ICE detuvieron el coche que los 48 años de edad, Avelica conducía y lo detuvieron delante de su esposa y su hija de 13 años de edad. El padre de cuatro hijos que son ciudadanos estadounidenses, Avelica ha vivido en el sur de California desde que tenía 21 años y ha trabajado de manera constante durante todo ese tiempo, 60 y 70 horas a la semana, en los restaurantes locales.
En un flagrante acto de represalia política, de 22 años de edad, Daniela Vargas fue detenido por agentes de ICE en Jackson, Mississippi, después de salir de una conferencia de prensa en la que protestó por la detención de su padre y su hermano el 15 de febrero La familia Vargas llegó a los Estados Unidos de Argentina en 2001, cuando Daniela tenía sólo siete años de edad. Como la llegada del niño, Daniela fue dado exención temporal de la deportación bajo el programa de DACA, pero su exención caducó mientras ella estaba tratando de aumentar la cuota de $ 495 a extenderlo. Su abogado dijo que ella estaba en un centro de detención de ICE en Louisiana y se procesa como un rebasamiento de exención de visado y deportado a Argentina sin una audiencia.
El jueves, Juan Carlos García Fomperosa fue a la oficina de ICE en Phoenix, Arizona, manteniendo una cita para discutir su solicitud de asilo. Ha vivido en los EE.UU. durante 20 años y es el único padre de tres hijos que son ciudadanos estadounidenses. Una hora más tarde, los agentes de ICE cayeron fuera una bolsa con algunas de sus pertenencias en su casa y se lo entregó a su 23 años de edad, hija Yennifer Sánchez. El viernes por la mañana, Fomperosa García llamó a sus hijos para hacerles saber que había sido deportado a México, dejando a Sánchez como el único guardián de su 17 años de edad, hermano y hermana de 14 años de edad.
Hay muchas más historias como éstas, la mayoría de los cuales ni siquiera están cubiertos en los medios locales.
Una atmósfera de miedo y el terror se está apoderando de las comunidades de inmigrantes en todo el país. La crueldad de estas medidas no es un accidente o un exceso, sino una característica deliberada e intencional del pogrom anti-inmigrante desatada por las órdenes ejecutivas del presidente Trump el 25 de enero asesores de la Casa Blanca dijo que el propósito de las órdenes era "desencadenar" la inmigración agentes, en otras palabras, a ellos libres de restricciones en el tratamiento de los miles que son o serán redondeados.
Esta realidad es subrayada por un informe de Reuters que el Departamento de Seguridad Nacional, que incluye tanto el ICE y el Servicio de Protección de la Frontera, está considerando una propuesta para la separación sistemática de las mujeres y los niños detenidos al cruzar la frontera ilegalmente juntos. Según los informes, funcionarios del DHS informó a los funcionarios de asilo en el plan, cuyo propósito, decían, era "disuadir a las madres de la migración a los Estados Unidos con sus hijos."
La nueva política permitiría a los agentes federales para mantener madres en prisión indefinidamente, mientras que sus hijos serían entregados a la custodia de protección del Departamento de Salud y Servicios Humanos, lo que nos sitúa en el "ambiente menos restrictivo" que podría ofrecer, incluyendo una tutor patrocinada por el estado. Si y cómo las madres se reunieron con sus hijos, durante o después de la deportación, sigue sin estar claro.
El orden tendría dos propósitos principales: para disminuir el impacto de una orden judicial emitida en julio pasado que impedía la detención prolongada de los niños, lo que ha obligado a ICE para liberar la mayoría de las madres con niños de los centros de detención; y para intimidar a futuros refugiados de América Central, donde la mayoría de las familias que vienen. La palabra se extendió a los países que las madres que vienen a los Estados Unidos perderá los niños que están tratando de proteger.
Mientras que Trump ha aumentado en gran medida el ataque a los inmigrantes, que está construyendo en el monstruoso aparato de represión desarrollada por las administraciones de Bush y Obama, particularmente el último.
La continuidad en el maltrato de los inmigrantes se demuestra en la demanda presentada contra un importante contratista de prisión por el ICE, Grupo GEO, en Aurora, Colorado, en los suburbios de Denver. La demanda acusa que decenas de miles se vieron obligados a trabajar por $ 1 por día o por nada en absoluto, en violación de las leyes federales contra la esclavitud. El trabajo forzado, con la participación de servicios de alimentos, limpieza y mantenimiento en la instalación, permitió GEO para ejecutar la prisión con un solo portero, embolsando grandes ganancias. En muchos casos, la demanda alega, los inmigrantes se vieron obligados a "voluntario" para los detalles de trabajo con la amenaza de ser colocado en régimen de aislamiento en caso de negarse.
El gobierno federal ha establecido lo que equivale a campos de internamiento en masa. Se gasta más en el ICE y la Patrulla Fronteriza que en todas las otras agencias de aplicación de la ley federal combinada: más de $ 19 mil millones al año. El número de detenidos por las autoridades de inmigración, más de 400.000 al año, es mayor que el número total de presos en poder de la Oficina Federal de Prisiones para todos los delitos federales. Trump propone añadir otros 10.000 agentes de ICE y 5.000 agentes de la Patrulla Fronteriza a lo que ya es un pequeño ejército.
Los métodos de un estado policial infligidos a los trabajadores inmigrantes son un ensayo a gran escala por lo que la administración Trump y la clase gobernante de Estados Unidos, demócratas y republicanos, tienen en el almacén para la clase obrera en su conjunto. El tratamiento atroz de los inmigrantes es una preparación para el despliegue de la gran maquinaria de la represión estatal contra próximas luchas por los trabajadores, y los inmigrantes, en defensa de sus puestos de trabajo, el nivel de vida y los derechos democráticos nacidos en el país.
La clase obrera en los Estados Unidos debe oponerse a la furia anti-inmigrante de la administración con la complicidad de los partidos Demócrata Partido-y defender el derecho de los trabajadores de todos los rincones del mundo para vivir y trabajar en el país de su elección con Trump derechos y sin temor a la detención, la deportación o la represión ciudadanía plena.
Patrick Martin

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